Las semillas de sésamo negro son traídas desde India, Venezuela o México y tienen una apariencia ovalada y plana. Si bien es muy usado para la elaboración del aceite de sésamo, también se utiliza para cocinar, sazonar sopas y ensaladas, y dar un toque más refinado a productos horneados (como algunos tipos de pan) y postres.
Al hablar de los beneficios para la salud se puede decir que detrás de su pequeño tamaño se esconde un verdadero superalimento. Tanto así que ayuda a la protección de la salud cardiovascular; tiene efectos antioxidantes y antiinflamatorios; e incluso, se han reconocido sus resultados positivos frente a enfermedades oncológicas y también sobre la hipertensión arterial.
Se comercializa en sacos de papel o de polipropileno de 25 kg, y en bolsas de polietileno de 5 kg.
Además del anterior, también existe el sésamo blanco, muy popular en la producción de alimentos y que, a diferencia del negro, sí tiene cáscara. Esta se retira de la semilla para su comercialización y se puede consumir directamente debido a su suave sabor al paladar.
Al igual que el sésamo negro la procedencia del sésamo blanco puede ser India, Venezuela o México, se vende en formatos de 25 y 5kg.
Finalmente, también se puede adquirir el sésamo tostado en formatos de 25 y 5 kg.